...

Yo ya sé distinguir lo que importa. Últimamente el amor viene en ráfagas, junto con el dolor. He aprendido que de ciertas cosas uno no se puede desprender, pero sí se puede aprender a afrontarlas de otra manera. Soy una ignorante un poco más sabia ahora, ahora que sé que la vida no siempre te prepara sorpresas agradables. No siempre, pero sí algunas veces. Y yo vivo de la expectación de lo que pueda ocurrir.