...

Se cansó el vaso de sostener la medianoche y la cinta aislante de tapar el riego de los ojos. Sin excusas y sin demasiados motivos.
Quemaban los puntos y seguidos. Los aparte nunca fueron del todo curativos.
Necesitando finales.
FINALES que salgan de otra boca.
Todo necesita cerrar el círculo que abrió para poder seguir adelante.
Pero una vez perdido el rastro, parece inútil toda la distancia que se ponga a lo largo del tiempo.
Nunca cesa...